Cómo conseguí publicar en National Geographic. Comienzo este post con una pregunta que muchos me están haciendo desde que comuniqué el logro de haber vendido una fotografía a National Geographic.
Comentar que esta entrada está basada en mi experiencia y contrastada con la de otras personas que también han conseguido alguna publicación en la famosa revista, en concreto en la edición National Geographic Viajes.
Conozco a gente que ha conseguido que le publiquen alguna fotografía incluso sin saberlo. Comentar que National Geographic tiene sus propios fotógrafos pero sería imposible tener una plantilla tan amplia como para cubrir todas las publicaciones que hacen en cualquier rincón del mundo.
Lo primero que hacen es planificar el contenido. Dividen la revista en lugares, zonas geográficas e incluso rutas. Antes de generar el contenido, ya saben cuántas fotografías van a necesitar para cada publicación, incluso tienen definido el formato de cada publicación. Según el contenido, a veces necesitan fotografías para cubrir una página, otras veces necesitan que la publicación sea a doble página, etc…, por supuesto que vender una fotografía que saldrá en una página no se pagará igual que una que se publicará a doble página.
Cuando ya tienen el contenido definido, es hora de buscar las fotografías. Lo más sencillo y más económico es buscar fotografías en bancos de imágenes. ¿Qué son los bancos de imágenes? Un banco de imágenes es una plataforma donde hay alojadas millones de fotografías para que particulares o empresas puedan comprar fotografías. Cualquier fotógrafo profesional o no, bajo unos requisitos, puede subir a estas plataformas fotográficas para que cualquiera pueda comprarlas. Generalmente se compran licencias según su uso. No es lo mismo que una persona te compre una fotografía para hacer un cuadro y colgarlo en casa que una empresa compre tu fotografía para uso comercial o publicitario, al igual que no pagará la misma cantidad ni tu cobrarás lo mismo por una licencia que por otra. La ventaja de estas plataformas para el que vende es que la fotografía se puede vender tantas veces como compradores haya, pero hay que asumir que lo que se gana por la venta de una fotografía será insignificante, en concreto serán unos céntimos los que vayan a tus bolsillos. Así que para ganar dinero en estas plataformas hay que tener muchas fotografías y venderlas muchas veces. Si por una fotografía te pagan poco, os podéis imaginar que el que compra la fotografía apenas paga por ella, dando por echo que un porcentaje de la compra se lo quedará la plataforma.
Volviendo al tema de cómo buscan imágenes para el contenido de la revista… Por ejemplo, si en una sección quieren hablar sobre las galernas (para los que no sepáis lo que es os dejo aquí un enlace), lo más sencillo es buscar en estas agencias en las que hay millones de fotografías y seguro que alguna coincide con lo que buscan. Lo más normal es buscar por etiquetas, de ahí la importancia de usarlas al guardar o publicar fotografías. En este ejemplo en concreto podrían ser tales como #galerna #costavasca #temporal #marcantabrico etc…. Al final encontrarán una imagen que sirva para el contenido y por muy poco dinero la podrán comprar para su uso, a cambio, tú recibirás una miseria y la satisfacción de haber vendido una fotografía. Aclararos que cuando vendes una fotografía con este sistema, la plataforma te informa de la venta pero no te dice quien o para qué se ha comprado. Para ello, lo que yo suelo hacer, es de vez en cuando, desde el propio buscador de google imágenes, hacer una búsqueda de la fotografía vendida, para ver si encuentro la fotografía en algún enlace o web que no reconozca. Recientemente, con este sistema de búsqueda, en encontrado en la web de un hotel una fotografía mía que vendí hace unos meses. En concreto, he cobrado 0,25$ por esta fotografía. De echo, cuando saque algo de tiempo, tengo que investigar si esta venta es legal, porque me están pagando lo mismo esta fotografía que su fin es promocionar un hotel que otras fotografías que he vendido para uso personal.
Como veis, este sistema para comprar una fotografía es rápida, barata y legal. Y ahora viene la conclusión de mi experiencia…., ¿qué ocurre cuando no encuentran la fotografía que buscan? La respuesta es sencilla, buscan en redes sociales y contactan directamente con el fotógrafo, y claro esta, lo que te pagan no tiene ni comparación con lo que puedes ganar en el banco de imágenes.
En mi caso, la fotografía que me han comprado ha sido una del puerto de Mutriku. El banco de imágenes que por el momento uso es shutterStock. Si entras y buscas una fotografía que contenga las palabras “Puerto Mutriku” solo aparecen 10 resultados, y de ahí les tiene que gustar alguna fotografía y que cumplan sus criterios de calidad. Por lo tanto la imagen del puerto de Mutriku la tuvieron que buscar en otro lado, y qué mejor que en una red social donde hoy en día todos usamos etiquetas de geolocalización y descripción. De la misma manera que en el banco de imágenes, iniciaron la búsqueda en redes sociales, hasta que por arte de magia, se cruzaron con mi fotografía y les gustó.
El siguiente paso fue contactar conmigo por email, de ahí la importancia de identificar de forma clara la autoría y propiedad de la fotografía. Lo que yo hago es firma en las fotos y las etiqueto con mi nombre y página web. Como veis, no hay ningún truco, “simplemente” tiene que haber calidad fotográfica y que se de la casualidad que busquen y encuentren una fotografía como la tuya.
Y tú ¿has soñado alguna vez con publicar en National Geographic? Pues sigue trabajando, y lo más importante, comparte tu trabajo para que lo vea cuanta más gente mejor. Para mí la fotografía es compartir mis momentos con los demás.
Si conocéis alguna otra experiencia o pensabais que estas empresas funcionaban de otra manera…, estaré encantado de leeros. Para terminar, os dejo con la imagen del Puerto de Mutriku.
